Soy una diosa de nombre olvidado, desterrada en un mundo limitado por países, fronteras y credos. Líneas imaginarías y pensamientos invisibles dan forma a una jungla de mil razas, lenguas y costumbres. He perdido el poder y los atributos al…
Camino de vuelta a casa sin saber como se va, ni tan siquiera si existe la ruta que he de tomar. Sé que me dirijo con convencimiento y voluntad pero no distingo si es un sueño o algo real. Me…
Danzaba, buscando un lugar,la forma que quería adoptary las criaturas con las queconfabularía su historia,singuión, ni principio, ni final.Danzando en otro lugar, mehallaba yo, buscando undestino, una forma y unlugar.De repente, ví una anciana regordeta, de tez clara ycabellos oscuros,…
Confidencias de madrugada a la luz de la luna al abrigo de mágicas montañas y una casita de arabescos coronando una colina. Y como si del escenario de un teatro se trarara, Marte hace su aparición en la oscuridad de…
La proyección de mis pensamientos me persigue en forma de sombra, se hace presente. Poco a poco, inunda mi ser y todo se vuelve oscuro, denso y frio. Emerjen sentimientos de culpa, tristeza y abandono. Me divido en mil formas…
Tu nombre evoca valles profundosentre nevadas montañas.Tu nombre es tierra, aíre y agua.Tu corazón, bálsamo, amor y fuego.Majestuosa, recía y rotunda te abrespaso clara, diafana y profunda comoel agua, que se escurre entre losrecovecos del valle para resurgir en la…
El ruido cesa de repente en mi cabeza, el circuito donde se agolpan los pensamientos se ha interrumpido. El tiempo se ha parado, mis sentidos se agudizan esperando ver, sentir, tal vez, quizás oir. Siento un cosquilleo que sube por…
La felicidad es un instante,una mirada, una palabra, unaliento cercano, un beso.Ese instante sublime dejaun poso que va llenando,granito a granito, esa nostalgía del alma de algoque reconoce pero no sabede su significado, alexistir en la dualidad.La felicidad es una…
Princesa, asesína, martir. ¿Que prefiero? La gloría, la venganza, el dolor, la rabía, la ira, el odio. Reconozco ese amargo sabor, ese movimiento que palpo sutilmente y que crece como una mala hierba, rápidamente y sin piedad, invadiendo las entrañas…